A medida que los niños crecen, se vuelven grandes exploradores de su entorno. En casa, quieren subirse a los muebles, bajar escaleras, abrir cajones, envases y probar todo lo que está a su alrededor. ¡Tienen tanta energía, curiosidad y ganas de conocer el mundo! Para acompañar a tu hijo en esta etapa, es fundamental implementar medidas que ayuden a la prevención de riesgos y accidentes en el hogar. Desde el dormitorio hasta la cocina, todos los espacios pueden ser más seguros si sigues estas recomendaciones.
Casa a prueba de niños
Puertas, ventanas, muebles, elementos de cocina, enchufes; todo en casa puede ser un potencial riesgo para un bebé, en especial cuando comienza a gatear y caminar. Para prevenir accidentes, debes comenzar por identificar áreas críticas en tu hogar, anticipar posibles peligros cotidianos y crear ambientes que se adapten a las distintas etapas de desarrollo del niño. Vamos por partes:
Prevención de riesgos en las habitaciones
El dormitorio de tu hijo debe ser el primer espacio seguro. Verifica que la cuna esté libre de riesgos, con barandas siempre levantadas y aseguradas. Retira móviles o juguetes colgantes y ajusta el colchón en la posición más baja, para prevenir accidentes. Además, instala protectores en las esquinas de los muebles y asegura los armarios a la pared para evitar vuelcos.
No olvides revisar las puertas y ventanas. Usa bisagras de seguridad en las puertas y coloca rejillas o cierres en las ventanas. Ata los cordones de cortinas o persianas para que no sean un riesgo. Si hay balcones, bloquea el acceso con pestillos altos o cerraduras.
Zonas críticas: escaleras y pasillos
Las escaleras y los pasillos son áreas que requieren especial atención en la prevención de accidentes. Instala rejas de seguridad en la parte superior e inferior de las escaleras. Coloca tiras antideslizantes en los peldaños y asegúrate de que las barandas tengan una altura adecuada. Los barrotes deben tener una separación máxima de 10 cm para evitar que los niños metan la cabeza.
En los pasillos, mantén fuera del alcance de los niños todos los objetos pequeños, como adornos o cables sueltos. Si hay alfombras, fíjalas al suelo para prevenir caídas.
Riesgos comunes en la cocina
La cocina es uno de los espacios más peligrosos del hogar para bebés y niños. Para prevenir riesgos, mantén los productos de limpieza, utensilios filosos y pequeños electrodomésticos fuera del alcance de tus hijos. Los mangos de ollas y sartenes deben apuntar hacia el interior de la cocina para que los pequeños no los alcancen. No permitas que se acerquen al horno.
Si tienes cajones bajos, usa cierres de seguridad para evitar que el niño acceda a ellos. Además, nunca cargues a tu bebé mientras cocinas ni dejes manteles colgando que puedan tirar.
Precaución con el agua: baño y piscinas
El agua es una potencial fuente de accidentes graves. Para proteger a tu hijo, utiliza tapetes antideslizantes en el baño y supervísalo siempre mientras se baña. Usa una tina adecuada para su edad y no la llenes con más de 5 cm de agua. Si es posible, incorpora un seguro a la tapa del inodoro, para evitar que tu pequeño la abra.
Si tienes piscina, instala una reja perimetral de al menos 1.2 metros de altura y mantén la puerta de acceso cerrada con llave. Nunca dejes recipientes con agua al alcance del niño.
Electricidad y dispositivos electrónicos
Tapa todos los enchufes de tu casa con protectores de seguridad y desconecta los electrodomésticos pequeños cuando no los estés usando. Los cables deben estar fuera del alcance de los niños y no deben pasar por debajo de alfombras, ya que esto puede generar accidentes o tropiezos.
Evita que los niños se acerquen a estufas y calefactores, ya que pueden producir quemaduras graves. Si usas lámparas de pie, asegúralas para que no se caigan fácilmente.
Juguetes y espacios exteriores seguros
Elige juguetes seguros y adecuados para la edad de tu hijo. Revisa que no tengan piezas pequeñas que puedan ser ingeridas ni cuerdas largas que representen un peligro. Prefiere juguetes livianos que no puedan causar lesiones si se caen.
En los espacios exteriores, intenta adaptar el entorno para que sea seguro. Supervisa a tus hijos cuando juegan con mascotas y enséñales a respetar a los animales, especialmente mientras comen o duermen. Mantén las vacunas de las mascotas al día y evita el contacto con animales desconocidos.
Intoxicaciones: prevenir es clave
Guarda bajo llave todos los productos tóxicos, medicamentos y perfumes. Nunca coloques estas sustancias en envases de bebidas, ya que los niños podrían confundirlos. Educa a los pequeños sobre los riesgos de ingerir sustancias desconocidas y ten a mano los números de emergencia.
Si utilizas productos de limpieza, asegúrate de dejarlos en lugares altos o dentro de muebles con cerraduras de seguridad. Es importante enseñar a los niños a no comer ni beber nada sin la supervisión de un adulto.
Un entorno seguro para crecer y explorar
La prevención de riesgos en el hogar es fundamental para que los niños puedan crecer y explorar su entorno con confianza, en las distintas etapas de su desarrollo. Garantizar ambientes seguros implica identificar las áreas de potencial peligro en tu casa, adaptar los espacios de uso cotidiano para evitar accidentes y proteger a tu hijo con supervisión constante, entre otras medidas. Recuerda que el bienestar y seguridad de tu pequeño siempre es lo más importante y que cada esfuerzo vale la pena.
FAQs:
¿Cómo prevenir riesgos en el hogar para los niños?
Para prevenir riesgos en el hogar, es fundamental identificar las áreas de peligro para los niños, adaptar los espacios cotidianos para evitar accidentes y protegerlos con supervisión constante.
¿Cómo prevenir situaciones de riesgo en niños?
Para prevenir situaciones de riesgos en niños se deben adaptar los espacios de la casa de acuerdo con sus distintas etapas del desarrollo y anticipar posibles peligros en los lugares donde el niño permanece, comenzando por su cuna, los juguetes y objetos que están a su alcance y las superficies por donde se desplaza. Incorporar seguros para niños y bloquear su acceso a zonas riesgosas es otra medida de precaución.
¿Cómo hacer un plan de prevención de riesgos en el hogar?
Hacer un plan de prevención de riesgos en el hogar implica identificar áreas potencialmente peligrosas para los niños e implementar medidas de seguridad para prevenir accidentes. Entre ellas: verificar que la cuna sea un espacio seguro y estable para tu hijo, sin móviles ni cuerdas que pueda tirar; incorporar seguros en puertas, ventanas, enchufes y cables; evitar que el niño acceda sin supervisión a lugares potencialmente riesgosos como la cocina, el baño, balcones, escaleras, pasillos, piscinas, piletas o recipientes con agua; desconectar los electrodomésticos cuando no los estés usando y comprobar la estabilidad de los muebles, además de la seguridad de cajones y closets.
Fuentes relevantes de información: